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PortuguêsBenjamín Hockin, un guerrero y ejemplo para muchos atletas
En la página ezinearticles.com, se lee un artículo publicado por Alejandro Guevara Onofre, escritor independiente, sobre Benjamín Hockin y lo describe como Héroe Nacional.
Dicho periodista es el autor de una serie de artículos de 220 países sobre la ecología, historia, turismo y héroes nacionales en los deportes olímpicos, empieza su nota (en iglés), empieza así; “Él (Benjamín Hockin) podría ser un nadador a tiempo completo para el equipo olímpico británico o España, pero quiso competir bajo la bandera de Paraguay, un pequeño país sudamericano conocido como uno de los países menos adelantados ! en el mapa mundial deportivo”. De esta manera destaca la figura del atleta.
Reproducimos la nota con traducción libre:
Paraguay, una de las primeras repúblicas independientes en el hemisferio occidental, no cuenta con una piscina de 50 metros, y a pesar de sus problemas con el entrenamiento y equipamiento deportivo, a Benjamin Hockin, cuyo padre es británico y su madre es de nacionalidad paraguaya, le encanta competir con esta nación sin salida al mar.
Es caso raro en el mundo en desarrollo, donde un número de atletas, de los boxeadores y futbolistas de los esgrimistas y arqueros, quieren convertirse en ciudadanos americanos- europeos, pero él prefirió competir por Paraguay.
A finales de 1990, por ejemplo, Eunice Barber de África, se convirtió en deportista francés después de competir como un atleta del país devastado por la guerra de Sierra Leona. En Juegos Olímpicos de Atlanta 1996, donde terminó en quinto lugar en la heptatlón femenino.
Los guerreros atletas de Paraguay
La mayoría de los triunfos de Paraguay han sido producidos por "guerrero-atletas", una envidia para muchos dirigentes olímpicos en la región.
En la segunda mitad de la década de 1980, el equipo de Copa Davis con Victor Pecci, Francisco González y Hugo Chapacu, derrotó a Estados Unidos en la ronda preliminar de la Copa Davis, bajo la dictadura anticomunista de Alfredo Stroessner.
Previamente, en la década de 1950, el equipo femenino de baloncesto ganó el Campeonato Sudamericano de básquetbol femenino al derrotar a Brasil 20-19, y después de eso, terminó quinto en el Torneo Mundial en la capital de Chile de Santiago.
En 1962, en Asunción, El básquetbol paraguayo volvió a ganar un campeonato Sudamericano en femenino, logrando su segundo trofeo continental por delante de Chile (medalla de plata) y Brasil (tercero).
En el Torneo Preolímpico de 1992, los futbolistas clasificaron para los Juegos Olímpicos de Barcelona. Asistieron en dicha competencias otros deportistas paraguayos como: Rossana de los Ríos y Larissa Schaerer (aún muy jóvenes). Rossana ganó el Abierto Juvenil de Francia. Más tarde, Edgar Baumann fue coronado como el segundo mejor lanzador de jabalina en el Hemisferio Occidental en los Juegos Panamericanos de Mar del Plata. Aparte de él, hubo otros destacados atletas como Nery Kennedy y Ramón Jiménez Gaona.
Durante el siguiente siglo, Paraguay, encabezado por José Luis Chilavert y luego por Roque Santa Cruz, se convirtió en uno de los pocos países en el mundo en clasificar a la Copa Mundial de la FIFA por cuarta vez en forma seguida y después ganó una medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004
En el último campeonato mundial de África, Paraguay ganó su grupo con cinco puntos, por delante de Eslovaquia, Nueva Zelanda e Italia.
Sin embargo, Paraguay no sólo ha producido los mejores atletas como Chilavert, Pecci, González, Bauman, De los Ríos y Kennedy, también tiene a otros ídolos como el nadador Benjamín Hockin.
Hockin: Embajador de Buena Voluntad
Benjamín Thomas Hockin Brusquetti nació el 27 de setiembre de 1986 en la ciudad de Barranquilla, Colombia. Después de vivir en el Caribe colombiano, donde aprendió a nadar, él y su familia se trasladó a Paraguay, país de su madre.
En esta nación escasamente poblada, Benjamin, conocido como "Benji", descubrió su "gran pasión" para la natación, compitiendo en los clubes locales, entre ellos el Deportivo Sajonia. Viajó con sus padres de vacaciones en Tenerife (España), donde tomó la decisión de permanecer en suelo español, donde sus padres habían estado trabajando.
Allí, comenzó una carrera como nadador amateur en el Club Deportivo Teneteide, mientras terminaba sus estudios escolares. Cuando cumplió 19 años, salió de España a Gran Bretaña para estudiar inglés y buscar nuevos horizontes.
Durante su estancia en el País de Gales e Inglaterra, lo llamaron para representar a Gran Bretaña.
Para convertirse en un nadador del Reino Unido, la tierra natal de su padre, Benjamin hizo su debut internacional en el torneo europeo en 2006. Al año siguiente, se dirigió a Australia para participar en el Campeonato Mundial FINA.
Entonces, Benjamin ganó plazas olímpicas en dos eventos a competir en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008.
Benjamín, fue uno de los integrantes del equipo británico que llegó a la final en la prueba de 4×100 estilo libre en el renombrado “Cubo de Agua”.
La superación de grandes obstáculos
Aunque Gran Bretaña será sede de los Juegos Olímpicos de 2012, no quiere competir por el país anfitrión. Su sueño es ser un atleta olímpico por Paraguay, el único país de América del Sur, donde no hay una sola piscina de tamaño olímpico.
Benjamín Hockin, fue suspendido por la FINA, debido a un cambio incorrecto de su ciudadanía, y que luego de ser habilitado logró ocho medallas (seis de plata) en el Campeonato Sudamericano (Odesur), que se cumplió en Medellín, Colombia, convirtiéndose en el primer nadador de Paraguay en ganar medalla en los eventos Continental desde marzo de 1976, cuando Emilio Abre terminó tercero en los 400 metros combinado individual en la ciudad de Maldonado en Uruguay.
El año 2011 resultó ser un año muy especial para él. ¿Por qué? En los Juegos Panamericanos recientes de Guadalajara, México (el más importante evento de pre-olímpica en el Hemisferio Occidental), Benjamin tuvo una de sus mayores satisfacciones cuando merecidamente fue nombrado el abanderado de Paraguay, y luego, el 18 de octubre, 2011, dio a su país su primera medalla Panamericana al terminar tercero en la prueba de 200 metros estilo libre con un nuevo récord sudamericano de 1:48:40, a expensas de Mathew Patton y Douglas Robinson (ambos de América).
Dos días antes, él y sus compatriotas – Renato Prono, José Lobo, y su hermano Charles (habían perdido en una medalla de bronce en el Panamericano de relevos de 400 metros estilo libre).
A pesar de enormes obstáculos, nunca se negó a entrenar con sus compañeros de equipo, con un enorme espíritu olímpico.
A diferencia de los nadadores de Ecuador, Venezuela y Perú, no había entrenadores y especialistas olímpicos (como nutricionistas), así como patrocinadores. Todos los días, desde la mañana hasta la tarde, tuvo un entrenamiento en formación sistemática en piscina de 25 metros.
A pocos meses de los Juegos Olímpicos en Londres, Benjamin Hockin se ha convertido en un modelo a seguir debido a su personalidad humilde y espíritu olímpico, y su pasión por Paraguay.
En una entrevista reciente, dijo Benjamin, "Para mí Paraguay es mi país … Es otro sabor (que compiten en la república de América del Sur). Me sentí muy orgulloso de ser Paraguayo. Una declaración de amor a la patria.
Gracias a su pasión, talento y disciplina, demuestra que los atletas son excelentes en cualquier parte del mundo, y así lo demostró en los Juegos Panamericanos al derrotar a estadounidenses y brasileños.
La Nota finaliza expresando “Buena suerte Benjamin para Londres 2012! Usted ya es un ganador!.